El componente clave de la cama es el colchón. Encontrar un colchón de calidad es muy importante para un sueño de alta calidad ya que en promedio pasamos un tercio de nuestra vida en la cama. Los colchones garantizan un sueño reparador y normalmente se compone de espuma y fibras.
Mirando a través de la historia, las personas pasaron de dormir en el suelo a dormir en camas simples hechas por el hombre con colchones ya en el Neolítico. Los primeros colchones estaban hechos de hojas y hierba, que se tenian juntas con la piel animal. Esto fue entre el 8000 y el 6000 aC. El primer intento de una cama de agua fue inventado por los persas en el 3500 antes de Cristo, y se hizo de pieles de cabra llenas de agua. Durante el Imperio Romano, en el 200 BC, las personas dormían en colchones rellenos de plumas. No fue hasta el 1865 que las bobinas de acero que ahora apoyan la mayoría de los colchones fueron inventados y patentados.
Los colchones han disfrutado de muchos avances en las últimas décadas. Hoy en día podemos disfrutar de la comodidad de los colchones de aire, colchones de espuma y colchones de memory foam . El material utilizado para construir los colchones es espuma de látex o espuma de poliuretano. Las personas que buscan comodidad pueden optar por los colchones futón y por supuesto todavía hay quienes disfrutan de la comodidad de los colchones de agua.
Las tres marcas de colchones más populares de EE.UU. son Sealy, Simmons y Serta. Los colchones vienen en tres tamaños estándar. Doble / Individual (91 x 191 cm), doble / completa (137 x 191 cm), Reina (152 x 198 cm) y King (183 x 198 cm). También existen las medidas rey de California, reina de California y reina olímpica, pero no son los comunes.
Conseguir una buena noche de sueño depende de muchos factores diferentes - el confort, el nivel de estrés y la temperatura ambiente. Uno de esos factores es el colchón y es también el primer edificio para un sueño reparador. Así que si usted quiere comprar un nuevo colchón, asegúrese de probar cada uno de ellos en la tienda, poniendose en la posición en la que normalmente duerme. Si puede, traiga su almohada cuando vaya de compras y trate de replicar lo más que pueda la manera en la cual duerme habitualmente para que pueda asegurarse de escoger el correcto. Los colchones, en promedio, se utilizan de siete a quince años así que ten cuidado con lo que eligas.
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